POR EL FIN DE LA PANDEMIA
El Papa Francisco se unió a la Jornada Mundial de Oración
convocada para el 14 de mayo de este 2020 por el Alto Comité de la Fraternidad
Humana junto con fieles y líderes de otras religiones para pedir por el fin de
la pandemia de coronavirus.
“Que Dios tenga piedad
de nosotros y detenga esta tragedia, esta pandemia y también las demás: la del
hambre, la de la guerra, la de los niños sin educación. Pedimos esto como
hermanos, todos juntos”, fue la oración del Pontífice
La iniciativa del
Comité es para hacer vida los objetivos del "Documento sobre la Fraternidad Humana"
firmado el 4 de febrero de 2019 por el Papa
Francisco y el gran Imán de Al-Azhar, Ahmed al-Tayyeb.
"Sostén a aquellos que están angustiados porque, para evitar el contagio, no pueden estar cerca de las personas enfermas. Infunde confianza a quienes viven en el temor de un futuro incierto y de las consecuencias en la economía y en el trabajo".
El Papa había escrito una carta a los fieles de todo el mundo en la que propuso "redescubrir la belleza de rezar el Rosario en casa durante el mes de mayo". Las restricciones de la pandemia, dice, nos han “obligado” a valorizar esta dimensión doméstica.
El Papa pide a la Madre de Dios que "consuele a los que se encuentran confundidos y lloran por la pérdida de sus seres queridos, a veces sepultados de un modo que hiere el alma".
"Sostén a aquellos que están angustiados porque, para evitar el contagio, no pueden estar cerca de las personas enfermas. Infunde confianza a quienes viven en el temor de un futuro incierto y de las consecuencias en la economía y en el trabajo".
"Protege a los médicos, a los enfermeros, al personal sanitario, a los voluntarios que en este periodo de emergencia combaten en primera línea y arriesgan sus vidas para salvar otras vidas, y le pide también por quienes "asisten, noche y día, a los enfermos, y a los sacerdotes que, con solicitud pastoral y compromiso evangélico, tratan de ayudar y sostener a todos".
"Virgen Santa, ilumina las mentes de los hombres y mujeres de Ciencia, para que encuentren las soluciones adecuadas y se venza este virus", y asiste "a los líderes de las naciones, para que actúen con sabiduría, diligencia y generosidad, socorriendo a los que carecen de lo necesario para vivir, planificando soluciones sociales y económicas de largo alcance y con un espíritu de solidaridad".
"Toca las conciencias para que las grandes sumas de dinero utilizadas en la incrementación y en el perfeccionamiento de armamentos sean destinadas a promover estudios adecuados para la prevención de futuras catástrofes similares".
Oh María, Consuelo de los afligidos, abraza a todos tus hijos atribulados, haz que Dios nos libere con su mano poderosa de esta terrible epidemia y que la vida pueda reanudar su curso normal con serenidad.
Nos encomendamos a Ti, que brillas en nuestro camino como signo de salvación y de esperanza. ¡Oh clementísima, oh piadosa, oh dulce Virgen María! Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario